El extraño de las notas.(I)

Cuando los días se hacen eternos, nada se le puede hacer para detener al aburrimiento transformado en dolor de cabeza y la ropa asfixiándote al estar metido en la cama para intentar dormir un poco más de la cuenta. Y así continuamente.

Este es mi remedio. Una de mis historietas os voy a contar. (Sinceramente es improvisado).

Una nota colgada en la nevera, un beso y un cuídate. Ella miraba a través de la ventana agrietada. Se debería cambiar, no aguantará la próxima tormenta.
El sol no había salido, aún así los pájaros, tan madrugadores como ella, ya estaban cantando a primera hora de la mañana.

Una historia aburrida que cuenta una vida sin encanto, eso pensaba ella cuando al llegar al metro se encontró con otra nota colgada en uno de los asientos dentro de un vagón.

Un beso y cuídate.

No, no era la misma letra.

El aroma a café procedente de los alientos amargos, adormecían sus párpados; esas ojeras negruzcas no se ocultaban ni con maquillaje caro. El sueño fue leve, un parón simplemente la despertó sobresaltada.

Tranquila, no te has pasado la parada, se tranquilizó.

Se mordía las uñas, deseaba que vibrara el móvil y como por arte de magia ( o de su insistencia mental) el móvil así lo hizo. Chasqueó la lengua cuando descubrió que no era lo que esperaba, ni siquiera abrió el mensaje.

(No quiero alargarlo mucho más).

Si los días los vivía en la plena desesperación. Vamos, vamos. Que llegue ya.
Las noches se inundaba en sueños ahogados en lágrimas.

Y no, no llegó.

Otra mañana de marzo, el sol ya calentaba, un poco extraño al parecer, mas si cabe que no encontró una nota pegada en la nevera.

Sola de nuevo.

Esta vez escogió su viaje en el autobús. En la parada había una nota depositada en el horario del bus, entrecerró los ojos.

¿Pero quién me está acosando?

Miró hacia todos los lados, los coches se amedrentaban en la rotonda sin escapatoria. Leyó la nota. Un beso y un punto final.  Lo arrugó al instante de leerlo porque no entendía nada. Hace días que no sabía nada de él; le sangraban los dedos sin uñas. Por puro aburrimiento y el bus no llegaba, abrió el mensaje sin leer.

Ha muerto. Un beso, cuídate.

Enviado desde el teléfono de su madre.

Broma pesada o llámalo como quieras, eso quería creer ella, lo necesitaba, necesitaba saber que eso era una broma sin gracia. Ni siquiera se había dado cuenta de que estaba de rodillas en el suelo.

Malditas notas.

Cómo,cómo,cómo.

(Esto aún no ha acabado).

El vídeo a lo mejor no tiene nada que ver con la historia o quizás un poco sí. La letra de la canción es importante como el videoclip para entender el vídeo en general. Lo aviso por si no tenéis idea.